De viaje con el gato 1

Introducción.

En automóvil, tren, avión o barco no siempre es fácil viajar con el gato. Es preciso procurarse con anticipación todo lo necesario: boletos, cesto adecuado, tranquilizantes, bebidas, todo lo anterior para asegurarle el máximo confort y evitar maullidos en los viajes largos.

Exposiciones felinas, fines de semana en la casa de campo, largas vacaciones, etc. Para un gato de ciudad, las ocasiones de viajar nunca faltan. Un dueño digno de este nombre deberá prever con tiempo si quiere que su amigo viva estos desplazamientos en las mejores condiciones posibles. Porque si algunos sujetos, habituados desde pequeños a los desplazamientos, aceptan tranquilamente la situación, otros soportan muy mal el traslado. Si el propietario del gato pretende pasar la noche en un hotel, no debe olvidar informarse si su compañero será admitido.

En cualquier modo, debe tomarse una precaución indispensable: fijar en el collar del gato una placa de identificación, porque es normal que un animal nervioso e inquieto quiera huir.

Comencemos con esta serie de como viajar con el gato.